Carmelo no debe dar la espalda al río
Por Gabriel Monteagudo
La noticia pasó desapercibida esta semana para los grandes medios de la capital pero es muy importante para el desarrollo del turismo en el departamento, y nos obliga a reflexionar sobre el futuro del puerto comercial en Carmelo.
Según este portal argentino lacapital.com.ar “se firmó un acuerdo de entendimiento entre el Ente Administrador del Puerto de Rosario (Enapro) y el presidente de la Administración Nacional de Puertos (ANP) de Uruguay, Alberto Díaz, quien confirmó que existen dos empresas interesadas”para que se cubra la ruta fluvial Montevideo – Colonia – Rosario – Buenos Aires, y viceversa. En este sentido, serían cruceros de entre 90 y 100 metros de eslora y poco calado (apto para la zona geográfica), con distintos niveles de servicio y confort, que podrían recorrer la ruta ribereña y ofrecer todas las combinaciones posibles para que los viajeros asciendan y desciendan en cualquiera de las cuatro ciudades.
Según pudo saber La Capital, una de las compañías interesadas es argentina y la restante extranjera. Ambas tuvieron contactos con las administraciones portuarias santafesina y uruguaya y, según manifestó el Presidente de ANP, “Díaz dejó en claro durante las Cuartas Jornadas Portuarias Internacionales (realizadas a principios de septiembre en La Fluvial) su voluntad de trabajar con Rosario. Y observó junto a otros actores que la terminal local, ubicada en la estratégica zona frente al Monumento, tiene una importante infraestructura”.
Y Carmelo, bien, gracias.
Parafraseando al intendente coloniense que, hablando de su idea de realizar la rambla costera, siempre señala que Carmelo “no debe darle la espalda al Río de la Plata”, la sentencia es adecuada cuando hablamos de proyectar nuestra ciudad en clave turística.
Ya lo hemos dicho en alguna otra oportunidad en EL ECO, y esta noticia nos da la razón: Carmelo debe potenciar su cultura náutica desarrollando lazos de intercambio a través del agua, como históricamente lo hicieron los carmelitanos cuando no existían rutas con Montevideo. Este aspecto, mirado desde el punto de vista del desarrollo turístico, deja claro que la ubicación del puerto comercial dentro del Arroyo de las Vacas es absolutamente inapropiado para pensar en la llegada de las embarcaciones que actualmente circulan por el Río de la Plata.
Ya era difícil cuando se planteó la llegada de Buquebús con alguna de sus embarcaciones más pequeñas, para el traslado de pasajeros en la ruta Carmelo- Tigre, y aún más para las embarcaciones de las que se habla en esta nota, con más de cien metros de eslora.
Por ello, y nadie en la esfera gubernamental parece estar pensando en ello, es necesario que, sea el gobierno nacional o sea el gobierno departamental, se obtenga “un pedazo de costa” sobre el Río de la Plata, a los efectos de edificar una terminal portuaria acorde a las embarcaciones de la época.
¿Por qué no lograr que se establezca una línea de turismo náutico que, además de Colonia del Sacramento, toque la ciudad de Carmelo?
En una edición anterior de EL ECO, mencionábamos el viejo muelle arenero que fue construido en la zona de Punta Piedras, del que aún pueden verse sus palos clavados en el río.
¿Por qué no pensar Carmelo hacia esa zona, y establecer allí una futura terminal portuaria que no solo sea destino de grandes embarcaciones de pasajeros sino también de un flujo permanente de turismo hacia nuestra ciudad?
En otros lugares ya están trabajando en esto. Habrá que ver por estos lares qué hacemos.