
Y si.
Cuando los hombres pasaron de tirar las piedras con una polea a inventar la rueda, se produjeron dificultades.
Se dieron cuenta que las cosas iban más rápido si le ponían abajo un par de elementos circulares, y a la vez, eso generó inconvenientes, porque todo comenzó a circular más rápido y eso hizo que tuvieran que pensar como parar eso que ahora rodaba a mayor velocidad. Y entonces tuvieron que inventar el freno, y carteles en los caminos para indicar el peligro y otras cosas más.
Con el semáforo pasa lo mismo, al principio los carmelitanos tendremos que adecuarnos a frenar si está la roja, a seguir si está la verde y a doblar si la flecha verde aparece. Si vamos a cruzar caminando, habrá que esperar que aparezca en la pantalla de enfrente el muñequito verde en pose de caminata.
Es el costo de pasar de la edad de piedra a la civilización, pequeño costo diría para terminar de una vez con los prehistóricos lomos de burro y los carteles que nadie mira y pasar de ser un pueblo con aspiraciones de ciudad, a una ciudad en serio.
Es increíble, pero hubo publicaciones durante esta semana donde se cuestionaba si los carmelitanos comprenderíamos el significado de las luces rojas y verdes que comenzaron a funcionar en esta esquina de 19 de Abril y Av. Artigas. Aunque usted no lo crea.
Lo cierto es que la alcaldesa Alicia Espíndola le ganó la pulseada a propios y extraños. Le ganó a los que, incluso dentro del Partido Nacional, criticaban la decisión de esta compra. En el plano político, la 904 y especialmente el grupo que rodea a Alicia, sale fortalecida en la interna blanca de Carmelo.
En un plano general, está claro que se podrá criticar la conveniencia del momento, de realizar o no una inversión de este tipo, porque siempre hay urgencias más importantes y diferentes para cada persona, pero una vez que la mayoría decidió, no parece sensato continuar oponiéndose por el mero ejercicio de la oposición en sí misma.
La obra está, se instaló y sin dudas es un gran adelanto para Carmelo. Ojalá se pongan muchos semáforos en otros cruces en los próximos años.
Una vez colocado, la realidad muestra que la propuesta de instalar más semáforos tendrá que estar, ineludiblemente, en cualquier propuesta programática de los próximos candidatos al municipio de Carmelo, sean del partido que sean.